LLega Pedrito por la tarde a casa procedente del cole y se extraña de que en la cocina no hay nadie. Escucha unos gemidos procedentes de la habitación de sus padres y se dirige hacia allí. Entreabre un poco la puerta y divisa a su padre montado sobre su madre en inequívoco signo de apareamiento puesto que ambos yacen completamente desnudos. Inmediatamente Pedrito cierra la puerta y se marcha a la cocina de nuevo disponiéndose a preparar la merienda.
Los padres se han dado cuenta de la presencia del niño y la madre dice bajito a su marido totalmente azorada:
-Torcuato, el niño nos ha visto, qué vergüenza ¿qué le diremos?-
A lo que responde el esposo con suficiencia:
-No te preocupes Evinselda, ya se me ocurrirá algo-
Vistiéndose rápidamente se dirige a la cocina donde encuentra a Pedrito zampándose un enorme bocata de mortadela.
-Hola hijo ¿Qué tal en el cole?- pregunta por decir algo.
-Bien papá, igual de aburrido que siempre. Por cierto ¿Qué estabas haciendo montado sobre mamá?-
-Nada importante hijo,como mamá está malita le he puesto una inyección-
-¡Vaya por Dios!- Exclama Pedrito visiblemente compungido. -Pues muy malita tiene que estar, porque esta mañana el lechero le puso otras dos-
:banana :la ola :ole :contentisim